Durante el miércoles y jueves de esta semana, he tenido la oportunidad de asistir al OME expo Madrid y tomar el pulso sobre lo que las marcas del sector nos ofrecen, quieren vender, y cómo visten sus productos en función de las nuevas necesidades que continuamente están surgiendo a la velocidad de la luz en las TIC. Herramientas para monitorizar, servicios de e-mail marketing, plataformas de blogs donde ofrecen posts y twitts patrocinados son algunas de ellas.
Pero más allá de toda la parte puramente comercial, lo interesante obviamente, es la información que se desprende de algunas de las ponencias que se han realizado durante el transcurso de OME expo Madrid. Es interesante porque surgen reflexiones y apuntes de valor que indican por dónde pueden ir evolucionando algunas herramientas o el sistema del marketing on line aunque en este momento nadie se atrevería a vaticinar nada seguro y concreto a la hora de augurar cómo será el marketing online en los próximos años, aunque eso sí hay conceptos que ya están aquí y han venido para quedarse aunque inmersos en una transformación continua, tan contínua como es este mundo del marketing online.
Concretamente, he escuchado dos ponencias que iban más allá de la venta de un producto y que han dejado algunas reflexiones en el aire que merecen la pena ser citadas. Por un lado, me refiero a la exposición que Jaime García Cantero realizó sobre la convulsión que supone para el marketing como para otras áreas habitar y desenvolverse en un nuevo escenario como es el de la llegada de las redes sociales. Esto no sería nada nuevo, tampoco el que no hay retorno y que han llegado para quedarse, pero eso sí con una vocación de cambio y transformación vertiginosos, cambios a la velocidad de la luz. Lo importante de esto es la consecuencia de ello y las ideas que salieron a colación: la comunidad como elemento central de tu marketing en este nuevo escenario de redes sociales. Las personas, y sobre todo las personas unidas entorno a una emoción o producto, la comunidad, son ese objeto oscuro de deseo tanto para, las marcas como para el marketing.
Una vez expuesta la relevancia de la comunidad y su captación en este nuevo contexto surge la reflexión de cómo llegar a nuestro público objetivo cómo engancharlo, cómo hablar con él, cómo retenerlo y fidelizarlo. Pues bien, en torno a este ‘ epicentro’ surgió en la exposición la idea de comunidad. De cómo el que crea que abrir una página en Facebook con tres mil fans está muy alejado de la idea real de lo que supone crear comunidad.
La comunidad es nuestro público objetivo y para ello, para conseguirlo no se trata simplemente de informar sobre lo que hacemos sino hacer que participen y mucho más allá de esa interactuación , conseguir que colaboren, que lleguen a ser parte de ese desarrollo.
Muchas áreas o sectores profesionales no son el coto cerrado de los que trabajan como profesionales ahí, con la llegada de las redes sociales las oportunidades de encontrar y ver talento van más allá de lo que los profesionales de un sector puedan ofrecer y lo podamos encontrar a través de personas que no se dedican a ese sector pero dan una respuesta creativa e innovadora mucho más directa y fresca que lo políticamente correcto a nivel profesional nos pueda ofrecer. Así en el área del cine podemos encontrarnos que ya no lo realicen los cineastas y que las posibilidades de creación se hayan expandido en este ámbito a cualquier persona creativa capaz de utilizar una cámara y editar para luego darle salida en internet; ni que los medios de comunicación tengan un poder absoluto sobre la información: por ejemplo, una grabación censurada como noticia por un país puede ser transmitida dos segundos después a través de youtube y lo pueden ver millones de usuarios como ocurrió con la polémica rueda de prensa de Sarkozy en Rusia.
Así pues en el marketing, para bien o para mal el poder y la gestión del marketing es muy probable que a estas alturas no esté en los que nos dedicamos a ello sino en los propios usuarios que sin saberlo están haciendo campaña y marketing de muchas de sus marcas sin ser conscientes de ello, de la manera más intuitiva.
La opinión pública es sustituida por la emoción pública que suscita en la comunidad su marca favorita. Un ejemplo es que esas experiencias se cuentan a través de cómo ha calado tu marca en esa comunidad que es fan de lo que hace y simboliza tu marca.
En una de las ponencias a colación de la emoción pública que crea comunidad y es el marketing de tu marca se habla del grado máximo como puede ser un fan que llegue a tatuarse tu marca como sucede con Harley Davidson. Estas personas disfrutan tatuándose el logo de esta marca porque se identifican con ella, aunque luego sean unos correctos padres de familia, sueñan, viven y transmiten a través de la emoción el valor de la marca, los mejores prescriptores de ella.
Hoy en día lo que genera valor más que crear opinión es el contar experiencias sobre una marca y los que lo están haciendo día a día son nuestros usuarios. Hoy en día en las redes, tu marketing lo hace tu comunidad
La imagen pertenece a josealoly